“Madre a tiempo parcial o loca a tiempo completo”

Sé que me quieres aquí, pero puedo ser una madre a tiempo parcial o una loca a tiempo completo” – Joan Feynman (1927- )

 

Joan Feynman es bien conocida por su contribución al conocimiento de la magnetosfera. Concretamente por sus estudios sobre el origen de las auroras y por desarrollar un método para predecir las manchas solares. Es una eminencia científica con reconocimientos como el de investigadora científica de élite del Laboratorio de Propulsión a Chorro (JPL) en 1999 y la Exceptional Achievement Medal de la NASA en el año 2000.

Joan Feynman junto a su hermano Richard.

Sin embargo, por desgracia Joan no ha estado exenta de obstáculos, ofensas y descréditos en el ámbito científico por su condición de mujer desde temprana edad. Ya a los ocho años su propia madre le dijo que “Las mujeres no pueden hacer ciencia porque sus cerebros no están preparados para ello”. Sin embargo, Joan creció en un ambiente familiar que favorecía la curiosidad científica y su hermano Richard fue quien, al margen de prejuicios, alentó sus deseos de convertirse en científica. Fue él quien le sacó de la cama una noche de su niñez para mostrarle el fenómeno al que dedicaría una profunda pasión y gran parte de su carrera científica: las auroras. Tanto fue así que ambos pactaron dividirse el estudio de la física: Joan se quedaría con las auroras y Richard con el resto del universo. Un pacto que Richard respetó, a pesar de su prestigio y las ofertas que le hacían.

 Una vida marcada por el esfuerzo y la lucha contra tratos injustos en una época en la que la presencia de mujeres en la universidad era anecdótica, le llevó a grandes logros científicos sucedidos por periodos de inactividad en la investigación, lo que sumía a la Dra. Feynman en una profundas depresiones.

En uno de esos periodos de desempleo y de diligente trabajo en el hogar, desesperada acudió a su rabino para participar en los talleres para desempleados que organizaba la sinagoga. El rabino le tildó de egoísta al no pensar en la cantidad de hombres desempleados que merecían el trabajo mucho más que ella. Destrozada volvió a casa y tras meter la comida en la nevera y enchufar la aspiradora, la desconectó y rompió a llorar. Su hijo Charles, al verla en ese estado la acompañó en su llanto y tras fundirse en un largo abrazo, su madre le confesó: “ Sé que me quieres aquí, pero puedo ser una madre a tiempo parcial o una loca a tiempo completo”.

Joan Feynman recobró la estabilidad emocional al contacto con la investigación. Contacto que sigue manteniendo incluso ahora, retirada a sus 91, visitando frecuentemente la oficina.

 


Referencias:

  • Hirshberg, My Mother, the Scientist, Popular Science, 2003
  • Morrón, Joan Feynman, la física de las auroras, Los mundos de Brana, 2014.
  • https://en.wikipedia.org/wiki/Joan_Feynman